Publicamos
fotografías y relato de un viaje que nuestro amigo ferroaficionado Gastón
Labonia realizó el pasado sábado 6 de junio de 2015 entre las estaciones Retiro
y Zárate del Ferrocarril Mitre.
Gastón –quien
gentilmente nos envió fotos y texto- efectuó dicho viaje a bordo del tren
denominado “El Rosarino” conformado por una de las nuevas formaciones de origen
chino –locomotora y coches- incorporadas hace poco tiempo a nuestros
ferrocarriles.
A continuación, el texto y las fotografías:
Al confirmarse los rumores que existían sobre que el tren
denominado “El Rosarino” iba a sumar dos paradas, una en Campana y otra en
Zárate, sumada a la parada que ya le habían agregado en San Nicolás, me dispuse
el día sábado 6 de junio de 2015
a realizar dicho viaje hasta la estación Zárate.
El lunes 1° de junio, ya con las dos paradas habilitadas,
me acerqué hasta las oficinas de Retiro donde era un gentío tratando de
conseguir pasajes a Tucumán principalmente debido al bajo costo del viaje.
Evitando la cola me acerqué al personal de seguridad que estaba en la puerta
que me contestó de manera bastante descortés, diciendo que del tren a Rosario
no había nada que averiguar, que iba hasta Rosario, salía a las 16.07 horas y
que con suerte paraba en San Nicolás solamente. Rápidamente me di cuenta que
este muchacho no tenía idea de nada, mucho menos de buenos modales y me retiré.
Ese mismo lunes y martes siguiente traté de sacar los
boletos por el sistema de ventas online… fue imposible, cuando llegás al final
del procedimiento y pedís que te imprima el cupón para pagarlo -vía
Mercadopago- el sistema se queda colgado, no avanza.
Algo que me sorprendió fue que si lo comprás en línea, te
recargan $3,50 por comisión de compra electrónica. Por otro lado, realicé una
investigación minuciosa de los asientos libres y llegué a la conclusión que una
buena parte de los boletos se venden solo por ventanilla y no están disponibles
“en línea”.
El miércoles 3 de junio, fui a Retiro e hice la compra
personalmente; si bien la atención de Ferrocentral no se destacaba por ser muy
buena, por lo menos cuando te acercabas a la ventanilla te decían buen día o
buenas tardes según correspondiese. No obstante el día sábado 13.59 horas quise
hacer la prueba de volver a comprar “en línea” y no pude, directamente me
figuraba como que no estaba disponible la compra de boletos para ese día.
El día sábado 6 de junio llegué a Retiro treinta minutos
antes de la salida del tren, me acerqué a la entrada de Plataforma 6, muy
amablemente una chica me pidió el pasaje y el DNI, controló todo y luego me
dijo que tenga todo en la mano que unos metros más adelante me iban a pedir
nuevamente estos ítems. Así sucedió y aproveché para pedir permiso para
acercarme a la locomotora, a lo cual me dijeron que no había ningún problema
pero no me iba a poder subir, les dije que solo quería verla de cerca y estuvo
todo bien. El trato del personal el tren fue muy cordial.
Por supuesto, al llegar a la locomotora no perdí
oportunidad de sacar la cámara y tirar un par de fotos. Igual nadie me dijo
nada.
La formación estaba conformada de la siguiente manera: Coches
Primera: 503 – 502 – 501 – Coche Comedor – Coches Pullman: 402 – 401 – Coche Furgón – Locomotora.
Posteriormente me apresté a subir al tren, tenía pasaje
para el coche 502, pero cuando me acerqué al mismo, un asistente masculino o
azafata -no sé qué nombre ponerle- me dijo que para ese viaje había poquitos
pasajeros así que ibamos a subir todos al coche 501. Tenía prácticamente un
coche entero para mí solo. Posteriormente recorrí el tren y llegué a
contabilizar 14 pasajeros, entre Pullman y Primera.
No pude contabilizar bien la cantidad de personal propio
del tren incluyendo conductores, personal del coche restaurant, etc., pero no eran
menos de diez. En Campana no vi bajar a nadie, en Zárate bajamos dos personas y
subió una familia de aproximadamente cinco integrantes.
El horario de salida estaba previsto para las 16.07 horas
pero el tren salió a las 16.20 horas. Hacía un rato atrás había leído un
mensaje en mi celular de un grupo de ferroaficionados donde avisaban que estaba
por General Pacheco el tren de cargas denominado “El Bobinero” descendente,
situación que me llevó a pensar lo que podría pasar con la salida del tren,
situación que después se materializó.
Desde Retiro hasta J. L. Suárez estuvimos parados en más de
diez oportunidades, la más notoria fue la de Villa Ballester que llegamos a
estar quince minutos detenidos.
No obstante la llegada a Zárate sucedió en horario;
realmente durante el trayecto el tren caminó bastante bien, rondó generalmente
los 70 kilómetros
por hora y aflojando la marcha en las estaciones. La estación por la que que
pasó más despacio fue Escobar, no superó los 20 kilómetros por
hora.
Las estaciones que por las que pasó más velozmente fueron, primero Otamendi a 66km/h y después General
Pacheco a 51 km/h .
La velocidad más alta fue 101
km/h entre General Pacheco y Benavidez. (Adjunto captura
de la pantalla del GPS con el cual medí todo el recorrido desde J. L. Suárez
hasta Bancalari).
Claramente se nota que la locomotora anda lindo, muy suave
cuando frena y acelera lindo. La suspensión de los vagones parece ser buena.
Por supuesto, todo lo nuevo es lindo, veremos que pasa con el paso del tiempo.
En lo que respecta a la comodidad de los coches hay puntos
que en lo personal dejan que desear y no comprendo como con la experiencia que
tenemos en el país en construcción de material rodante, nadie se haya dado
cuenta de ciertos detalles que se omitieron; incluso en algunos aspectos,
considero que los viejos coches Materfer, Toshiba y Werkspoor eran superiores.
Por empezar, los asientos son duros, no tan duros como los
CSR eléctricos pero no tienen la comodidad necesaria para realizar un viaje de
15 horas o similar. Los asientos se reclinan muy poco (adjunto foto donde se ve
claramente la posición normal y la posición de máxima reclinación,
prácticamente es lo mismo); es interesante la opción de la bandeja que se baja;
otra gran error es el hecho que el apoya brazos que se encuentra en el medio de
los dos asientos es único, por lo tanto si viajo con una persona al lado, solo
uno va a poder apoyar el brazo.
Otro tema a tener en cuenta es que el asiento
delantero no tiene el famoso apoya pies, por otro lado cuando se estira el pie
se chocá con una de las bases del asiento, por ende, si se pretende viajar con
los pies estirados es necesario buscar el hueco comprendido entre las dos bases
del asiento situado adelante. Otro tema, en lo personal no menor, es que los
asientos no se dan vuelta.
La otra posibilidad es viajar en el medio del vagón donde
los asientos se enfrentan y hay una mesita, pero aquí hay otro problema, los
pasajeros enfrentados de sendos lados no pueden estirar las piernas, o las
estira uno, o las estira el otro o se organizar para hacer un “estiramiento
ordenado y coordinado”. Si viajamos solos claramente es el mejor lugar para
viajar.
Durante el viaje el trato del personal fue cordial, hay un
dispenser de agua caliente y fría en el coche restaurant y a pocos minutos de
arrancado el viaje nos dieron una caja con un alfajor, unas galletitas tipo Saladix
y una cajita de jugo de naranja. Después de un rato pasaron con una bolsa de
residuos para ver si alguien quería tirar la basura en la misma.
Otro tema es que viajar en Pullman o en Primera es
exactamente lo mismo, solo cambia que Pullman tiene una fila de dos asientos y
otra de uno. Sí me pareció muy importante el baño de discapacitados que está en
el coche Pullman, parece una habitación de un departamento.
La temperatura interior en el tren se encontraba en 22 ºC , y hacía bastante
calor; hice todo el viaje en remera, me pareció también que faltaba un poco de
ventilación.
Por último, me parecieron medio angostos los portaequipajes
sobre los asientos, entiendo que una valija grande con un sacudón medio fuerte
se viene abajo; lo que sí tiene de que bueno es que en un extremo del vagón hay
varios estantes con rejillas para poner valijas grandes.
En términos generales el viaje fue bueno, es más cómodo que
viajar en un micro de larga distancia común; creo que para que suba más gente
tendrán que mejorar el horario y cambiar la estación de destino; pero
puntualmente creo que el problema reside en el tiempo de viaje.
Otro tema que me llamó la atención fue la vía ascendente
entre José León Suarez y Bancalari; como es de público conocimiento, el tren
toma en la primera estación la vía contraria, por ende la ascendente hace
tiempo que no se usa. Es impactante ver la cantidad de camiones al lado de la
misma volcando basura, cascotes, etc. Hay lugares donde la misma se encuentra
tapada, realmente va a hacer un problema cuando la renueven, van a tener que
poner alguna reja o pared de contención, algo similar de lo que había hecho TBA
en unos pocos metros a la salida de Suárez.
Por otro lado tendrán que copiar la idea del puente que
están haciendo en Km. 1 para las personas que quieren salir de la Villa 31 hacia la calle
Mujica; de lo contrario, será imposible correr un tren a buena velocidad por
esa zona.
Gastón Labonia
(Agradecemos a Gastón por habernos enviado las
fotografías y el relato que componen esta entrada).
Que buena experiencia. Yo tome ese tren el mes pasado 17/9/2018 y concuerda con todas las palabras dichas
ResponderBorrar